La redacción publicitaria tiene más de cien años.
Bueno, si nos ponemos exquisitos tiene muchos más pues hasta en la ciudad romana de Pompeya aparecen textos publicitarios en las paredes.
Pero tal y como la conocemos nosotros, cogió forma hace cien años en Estados Unidos.
Con esto te quiero decir que no estamos inventando nada y que el término “redacción publicitaria” no es ningún término inventado por vendehumos, gurús o demás personajes del marketing digital.
Eso no quiere decir que esté anticuada o que ya no sirve, al contrario: si seguimos hablando de redacción publicitaria será por algo, ¿no?
En este post te cuento por qué sigue estando de moda, cómo se ha adaptado a los medios digitales y cómo puedes vender con ella.
¿Qué es la redacción publicitaria?
La redacción publicitaria es el tipo de redacción que se utiliza con el fin de conseguir que el lector ejecute una acción, por lo general comprar un producto o contratar un servicio.
Por eso no es lo mismo ser un redactor publicitario que un redactor de contenidos, puesto que sus objetivos son distintos.
El redactor publicitario debe usar técnicas de persuasión para llevar al usuario hasta la compra, mientras que el redactor de contenido busca generar contenido para informar.
Ambos, eso sí, deben procurar ofrecer una buena redacción: ortografía, gramática, etc.
A través de estas técnicas de persuasión se intentan derribar objeciones, tocar puntos de dolor, despertar el interés… hasta que el usuario se convence para comprar.
Como ya he explicado en otros post, persuadir no es lo mismo que manipular.
Tipos de redacción publicitaria
Aunque la redacción publicitaria siempre tiene como último objetivo vender, la forma de llevarla a cabo puede cambiar según dónde se emplee.
También podrás verla definida como redacción creativa.
De ahí surgen distintas clases de redacción publicitaria:
- Clásica. Es la que se refiere sobre todo a la redacción de textos para anuncios de radio y televisión, guiones que se deben adaptar al formato audiovisual.
- Web. Sobre todo landing page y cartas de venta.
- SEM. Esta redacción se usa en la publicidad de pago de Google y tiene como objetivo conseguir clics en los resultados de búsqueda, es decir, atraer tráfico.
- SEO. La redacción publicitaria se utiliza en los title y meta description de los post de una web para que sean atractivos y atraigan clics.
- Redes sociales. Este tipo de redacción es peculiar porque debe adaptarse a los formatos de cada red en concreto, lo que hace que sea más especializada. No es igual redactar para Instagram que para LinkedIn.
Como te decía, en cualquiera de estos tipos el objetivo es vender pero al cambiar los formatos, debes ser capaz de adaptarte a ellos.
Por ejemplo, en un tweet tienes un límite de 140 caracteres mientras que en una página de ventas, por ejemplo, puedes explayarte con mucha más libertad.
Ese es el desafío de la redacción publicitaria y por eso debes dominar las técnicas de persuasión que exige.
Características de la redacción publicitaria
La redacción publicitaria no es escribir y ya. No es colocar algún eslogan manido y publicar. No es colocar un precio con descuento en mayúsculas y con exclamaciones.
Olvídate de todo eso.
No se trata de un típico mensaje comercial burdo, sino de algo mucho más estudiado y artesano.
Te voy a contar cuáles son los principios básicos de la redacción publicitaria.
Ten claro el enfoque
Antes de ponerte a escribir debes tener identificado hacia quién te vas a dirigir, es decir, a tu público objetivo.
Tienes que saber toda la información necesaria: su sexo, su edad, dónde vive, en qué trabaja, cuál es su nivel adquisitivo, qué hobbys tiene, qué teme, qué desea…
Para esto debes construir a los distintos buyer persona que hay dentro de tu público objetivo.
Por ejemplo, si tu público objetivo son mujeres un buyer persona será una chica de 22 años que estudia en la universidad, otro una mujer de 45 que trabaja como administrativa, otro una mujer de 60 que está prejubilada…
Dependiendo a qué tipo de cliente te dirijas a la hora de escribir, tendrás que tener en cuenta sus características concretas.
No debes perder de vista a tu potencial cliente porque, si no, tu mensaje será difuso y demasiado general.
Sé conciso
Como te decía, no estamos hablando de redacción de contenidos ni tampoco de redacción literaria, por ponerte otro ejemplo.
Tu objetivo es vender así que debes ser conciso e ir al grano. Utiliza un lenguaje sencillo y palabras específicas para que el mensaje sea unívoco y directo.
Si usas términos vagos o demasiado generales el mensaje no va a calar de la misma forma, y lo mismo te digo si das muchas vueltas en lugar de ir al grano.
Exprésate de forma sencilla y clara, pero contundente.
Echa un vistazo a los anuncios que hay a tu alrededor (no será difícil, recibimos miles de impactos publicitarios al día) y verás las técnicas que usan para llamar la atención y ser directos y específicos.
Hay cientos de buenos ejemplos de redacción publicitaria en Internet desde hace décadas. Analízalos y aprende cómo se han construido esos textos.
Conecta con el usuario
¿Y cómo lo haces? Mediante la vinculación emocional, para lo cual debes conocer muy bien a la persona a la que te diriges, como te comentaba antes.
Cuando hablo de crear una conexión emocional no me refiero a cosas como “si no usas este producto tu vida será una mierda” o rollos de este estilo, impactantes pero exagerados y desproporcionados.
Me refiero a que le cuentes al usuario cómo se va a sentir si compra el producto o qué experiencias va a tener o qué problemas concretos va a solucionar.
De nuevo piensa en tus últimas compras: ¿qué es lo que te motivó a hacerlas? ¿Qué anuncios te hacen pararte a leer?
Es la mejor forma de captar la atención de tu potencial cliente así que no olvides pensar en ello a la hora de crear un texto.
Conclusión
Por supuesto hay mucho más que decir acerca de la redacción publicitaria. Piensa que ni siquiera he mencionado aquí las fórmulas que se pueden emplear, por ejemplo.
Puedes seguir navegando por el blog para aprender más acerca de la redacción publicitaria o también puedes coger un atajo y venir a Aprende a Vender.
Allí dentro te voy a enseñar redacción publicitaria paso a paso para que puedas vender tus productos o servicios de una vez por todas.
Pero antes de nada, vamos a analizar tu negocio y te vamos a analizar a ti mismo para que ajustes tu mentalidad a la hora de crear una estrategia de marketing.
Te ayudaré a entender tu negocio desde la raíz para que puedas sacarlo a flote y aumentar tus ventas gracias a tus textos.
Te aseguro que te vas a sorprender desde la primera clase.
Ven a Aprende a Vender. Estamos haciendo cosas muy chulas ahí dentro.
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